Sin duda, los pisos de moquet equivalen a comodidad. Son, además, fáciles de limpiar y de colocar.

Si a ello se añade que se venden en una amplia gama de tejidos y diseños, pocos revestimientos podrán superar sus prestaciones.

Que tipos de moquets colocar

Con tacto

Las moquets responden a los gustos más exigentes en cuanto a comodidad.

Y, además, ningún pavimento las iguales en seguridad…

La moquet es un pavimento más resistente de lo que parece.

Excepto en la cocina o el baño –que necesitan pavimentos impermeables-, podrá instalarla en cualquier lugar de la casa.

Aunque las manchas se notan más, en los últimos años se han perfeccionado tanto las técnicas de fabricación que algunos de estos pavimentos lograr resistir a las manchas e incluso repeler el polvo.

Lana: la más cálida.

Las moquetas de lana pueden esta confeccionadas con pura lana, o bien con diferentes fibras sintéticas.

También se presentan tejidas y sin tejer –en este último caso, el pelo se sujeta a la base mediante adhesivos especiales-.

Conservación

Durante los primeros meses, quite el polvo con una escoba de paja. Después, basta con pasar la aspiradora periódicamente, aunque si limpia la moquet una vez al año con champú o un detergente líquido le sacará más partido.

Con fibras naturales.

En qué se diferencian de las moquets? Simplemente, tan sólo estas últimas tienen tramas, es decir, el anverso está formado por una material textil y el reverso es el soporte

Frescos y resistentes

Las fibras naturales, siempre se trazan y dan lugar a pisos texturados que resultan muy frescos y duraderos. Cuanto más apretado sea el trazado, más resistente será el piso.

Cuando instale moquet, no podrá prescindir de la  trincheta, que debe tener siempre cuchillas bien afiladas para que el corte sea limpio.