Grabados en tela.

Si han estado expuestos mucho tiempo a la luz, debe pasarles una solución de una parte de hipoclorito de sodio por cinco partes de agua. Enjuague solo con agua.

Limpieza de hierro forjado joyas de plata y oro.

Hierro forjado.

Cualquier objeto que haya sufrido la acción del oxido debe tratarse con disan. Si son objetos pequeños, deben permanecer sumergidos de dos a tres horas; de lo contrario use un trapo y frote con disan (en el ultimo caso repita el tratamiento varias veces).

En el caso de los herrajes de hierro forjado, el ideal es desmontarlos tanto para tratar los herrajes como la madera donde están montados. Si no resulta suficiente la inmersión en disan, use un tapón de lana de acero mojado en disan, para los rincones use un cepillo de dientes. Luego saquele brillo con una mezcla de ceniza y aceite común de mesa.

Jade.

Es una piedra preciosa de color verde más o menos intenso, usada como incrustación o como adorno. Su conservación requiere de todos los cuidados porque hay muchos agentes dañinos. El polvo es uno de ellos. En este caso, pase cera liquida y luego lustre con un paño de lana. La limpieza del jade es simple: necesita 250 gramos de agua y media taza de vinagre blanco. Deje secar y pase paño de lana.

Joyas.

Las siguientes sugerencias valen tanto para las incrustaciones de piedras preciosas como para joyas de uso personal.

De plata.

No use alcohol ni productos que lo contengan. Limpie con agua jabonosa de medio litro de agua tibia con una cucharada (de te) de jabón liquido y seque con paño muy limpio. Si se pudieran introducir en el agua jabonosa, hágalo en un recipiente con tapa; sacúdalo, enjuague las joyas y séquelas con un paño bien limpio. También puede usarse medio litro de agua tibia con 1 cucharada sopera de bicarbonato, enjuague y seque. Para sacarle mas brillo, frótelas con miga de pan.

De oro.

No use alcohol ni productos que lo contengan. Limpie con agua jabonosa de medio litro de agua tibia con una cucharada (de te) de jabón liquido de glicerina. Y seque con un paño muy limpio. Si se pudieran introducir en el agua jabonosa, hágalo en un recipiente con tapa; sacúdalo, enjuague las joyas y séquelas un paño bien limpio.

También puede usarse medio litro de agua tibia con una cucharada sopera de bicarbonato, enjuague y seque. Para sacarle mas brillo, frótelas con miga de pan.